7 consejos para la siesta de tu bebé

¿Sabías que los recién nacidos no distinguen si es de día o de noche?  Duermen seguido y cada 2-4 horas se despiertan para comer. Sus pequeños estómagos no  pueden retener suficiente leche para mantenerles satisfechos mucho tiempo y además,  necesitan reponer fuerzas, están continuamente moviéndose y explorando.  Por ese motivo, es tan necesaria la siesta del bebé.

Si bien es cierto que según la Fundación Nacional del Sueño de EE.UU, los recién nacidos deben  dormir de 14 a 17 horas en cada período de 24 horas, algunos suelen dormir hasta 18-19 horas  al día.  

Si tu bebé es de los que dormiría más tiempo, despiértale para que se alimente, al menos en sus  primeras 6-8 semanas de vida, que es cuando más necesita ganar peso.  

En realidad cada recién nacido tiene su propio patrón de sueño. Algunos duermen 5-6 horas  seguidas a partir de los 2-3 meses, mientras que otros son más inquietos y requieren más  atención.  

Según el estudio realizado por la Universidad de Massachusetts sobre la siesta del bebé, un  breve descanso durante el día mejora la memoria de los recién nacidos.  

Beneficios de la siesta para tu bebé  

▪ Se alimenta, gana peso y se desarrolla.  

▪ Repone fuerzas del cansancio en sus horas de actividad.  

▪ Retiene lo que va aprendiendo, lo asimila y deja espacio para absorber nueva  información.  

▪ Descansa mejor por la noche. Si acumula cansancio excesivo se sentirá luego demasiado  agitado para dormir.  

▪ Elimina tensiones. Después de unas horas de siesta, tu bebé se despertará contento y  con ganas de seguir descubriendo y aprendiendo. 

▪ Reduce la hiperactividad, ansiedad, depresión y riesgo de tener pesadillas.  

▪ Estabiliza su estado emocional, evita altibajos. De este modo la siesta del bebé le  ayudará a relacionarse y reaccionar positivamente con su entorno.  ▪ Le ayuda a crecer. La siesta libera la hormona del crecimiento, esencial para su  desarrollo.

Recomendaciones para una siesta segura  

Compartir la habitación con tu bebé en vez de dejarlo dormir en una habitación independiente,  te permitirá tenerlo cerca, consolarle, supervisarle y darle las tomas de forma más cómoda para  los dos.  

Pero compartir habitación es acostarle en una cuna, una cuna portátil o moisés en vuestra  habitación, no es compartir vuestra cama.  

Y es que según la Academia Americana de Pediatría (AAP) compartir cama con el bebé aumenta  el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) así como otras muertes relacionadas  con el sueño.  

Sigue estas recomendaciones para que la siesta de tu bebé sea segura:  

• Colócalo siempre boca arriba (sobre la espalda) para dormir, nunca boca abajo (sobre el  abdomen) ni de costado.  
• Utiliza un colchón firme, estable y con una sábana bajera bien ajustada. 
• Guarda los juguetes de peluche, almohadas, mantas, colchas y sábanas que no ajusten.  
• Evita abrigarle más de la cuenta, lo notarás con el sudor y la temperatura tan sólo  tocarle.  
• Ponle a dormir con el chupete, pero si lo rechaza o lo suelta mientras está dormido, no  le fuerces.  
• Ayúdale a dormir, hasta que tu bebé y tú empecéis a elaborar vuestra propia rutina.  

Algunos bebés bostezan, se muestran irritables, lloran por cualquier motivo o se frotan los ojos  y aun así, no quieren dormir. La mayoría de veces están más interesados en seguir jugando o  realizando cualquier actividad que parar para hacer la siesta. 

Saber cómo hacer que tu bebé se duerma durante el día puede ser un desafío, pero las siestas  del bebé son igual de importantes que dormir por la noche. 

Consejos para la siesta bebé  

1. Mantén la misma rutina de siestas cada día  

Los bebés necesitan tener rutinas para sentirse seguros, y más cuando son tan pequeños. Si le  acostumbras desde que nace, le costará menos aceptarlo.  

Haz que duerma la siesta de la misma forma que si fuera de noche.  Es importante que tu bebé se duerma siempre a la misma hora. Para ello, observa los momentos  del día en que está más cansado. Tú, mejor que nadie, podrá saber cuántas veces necesitará  dormir y por cuánto tiempo.  

2.No le compares con otros bebés  

Si a tu bebé le cuesta dormir, es normal que su siesta no sea muy larga.  A partir de los 13 meses aproximadamente empiezan sólo a dormir una siesta al día. Te resultará  más fácil dormirle si la hace después del almuerzo. 

3.Ajusta las siestas del bebé con regularidad  

A medida que tu bebé crece su necesidad de dormir se irá reduciendo progresivamente y  aunque cada niño es único, los patrones habituales son los siguientes:  

• De 1 a 3 meses, entre 15 y 17 horas de sueño por día.  
• De 6 a 12 meses, entre 14 y 15 horas de sueño por día  
• De 12 a 24 meses, entre 13 y 14 horas de sueño por día.  

Sabrás que tu bebé está listo para disminuir el número de siestas cuando notes cambios y  resistencia a la hora de descansar.  

4.Tu bebé debe aprender a dormirse solo  

Es la clave para que duerma bien y tranquilo. En otras palabras, tu bebé debe aprender a conciliar el sueño sin que le acunes, le cantes o estés  permanentemente a su lado, tanto por la noche como en sus horas de siesta. 

5.Crea un ambiente cómodo para ayudarle a dormir  

Deja la habitación con media luz o pon una cortina delgada para suavizar la luz del sol.  

Sigue el ritmo de tus actividades y las de tu familia, para que entienda que el sueño durante las  siestas es diferente.  

6.Conserva la calma, sé paciente pero firme a la vez  

Si notas que está cansado, cógelo y llévalo a su habitación. Déjalo en la cuna y sal.  Si llora, ve y tranquilízalo, pero luego vuelve a salir.  

Si ves que no consigue dormirse, ofrécele algún juguete, pero no dejes que se levante hasta que  haya descansado.  

7.Crea un “ritual” que le indique a tu bebé que es hora de descansar 

Dale un baño, léele un cuento, deja que juegue con algo tranquilo, ponle música que le ayude a  relajarse.  

Fíjate, los rituales antes de dormir son también beneficiosos para los padres, vosotros también  necesitáis descansar, reponer fuerzas y disfrutar de un sueño reparador.  

¿Por qué es bueno mantener la rutina de la siesta del bebé?  

Los bebés se sienten bien si conocen lo que va a suceder a continuación y cuánto más seguro y  relajado se encuentre tu bebé, más fácil le será conciliar el sueño.  

Y la hora de dormir debe ser más o menos la misma todas las noches, sin exceder más de una  hora entre el verano y el invierno.  

Cómo despertar a tu bebé de la siesta  

Los recién nacidos tienen una gran habilidad para ignorar el mundo a su alrededor cuando  quieren ponerse a dormir. Si te encuentras en la necesidad de despertarle, aquí te dejamos unos  trucos que tal vez aún no conozcas:  

Acércate con suavidad y calidez 

Puedes empezar con gestos esenciales como hablarle, cantarle o estimularle con delicadeza. 

Levántale, mueve sus brazos y piernas o hazle cosquillas en planta del pie o acaríciale las mejillas,  tú sabes lo que mejor le hace sentir.  

Desvístele con dulzura  

A los recién nacidos por lo general les desagrada que les desvistan.  

Cámbiale los pañales  

Aunque tu bebé no necesite un cambio y utilices el mismo pañal.  

Hacer los movimientos de cambio de pañales, especialmente si suele quedarse dormido antes  de terminar de comer, hará que se despierte.  

Límpialo con ternura  

Un baño con suavidad te funcionará seguro si falla todo lo demás.  Si quieres descubrir las ventajas de utilizar una capa de baño para tu bebé, este artículo te puede interesar.