Desde el instante en el que te quedas embarazada, hasta el día de dar a luz, el cuerpo cambia. Tú y tu bebé evolucionáis juntos a lo largo de las distintas etapas del embarazo. Por eso mismo, si has logrado quedarte embarazada, ¡enhorabuena!
Las etapas del embarazo determinan el desarrollo del bebé a lo largo de las 40 semanas que suelen durar, contando a partir del primer día de tu último periodo menstrual (UPM).
Para saber el avance del embarazo se usa el término “edad gestacional”. Conocer este dato nos ayudará a determinar si el feto está creciendo bien. No obstante, podemos establecer la edad gestacional después del nacimiento.
Si al nacer coincide la edad gestacional con los datos esperados se dice que el bebé es apropiado para la edad gestacional (AEG). Estos bebés suelen tener menos problemas que los que son pequeños o grandes para su edad gestacional.
Las 40 semanas que hemos mencionado suelen agruparse en trimestres. Durante este tiempo tanto el cuerpo de la mamá como el del bebé que está creciendo en su interior sufren muchos cambios ¡Veamos todas estas etapas del embarazo!
Los signos del embarazo
Si todavía no estás embarazada y estás pensando en ampliar tu familia, es importante que prestes atención a tu cuerpo. Los primeros signos del embarazo pueden ser muy leves y pasar fácilmente desapercibidos.
En muchas ocasiones el primer signo de embarazo es la falta del periodo menstrual. Aún así, esto no siempre puede ser un signo de embarazo porque hay mujeres que sufren periodos irregulares.
Otras alteraciones que pueden surgir al quedar embarazada son:
- Cansancio
- Hinchazón en diversas partes del cuerpo
- Más frecuencia en las ganas de orinar
- Cambios de estado de ánimo
- Cambios en las mamas
- Percepción de malos olores
- Náuseas
Para asegurarnos de si estamos en estado o no podemos recurrir a los diversos test de embarazo existentes. Estos determinarán si existe una hormona llamada gonadotropina coriónica humana, que es únicamente producida por la placenta.
Seguidamente, vamos a detallar los trimestres del embarazo para que conozcas los cambios.
Los trimestres
Durante los nueve meses que dura el embarazo, tu cuerpo pasa por muchos cambios para prepararse y cuidar del crecimiento de tu bebé.
Algunas mamás puede que no sientan muchos cambios, ya que cada mujer es completamente diferente y los embarazos también lo son. Así que no te preocupes si ya has estado embarazada anteriormente y sientes cosas diferentes ¡Es completamente normal!
A lo largo de este proceso, es fundamental acudir a los controles médicos para comprobar que el bebé se desarrolla correctamente y que la salud de la madre se mantiene en óptimas condiciones.
Primer trimestre (semana 1-12)
Durante la primera de las etapas del embarazo las hormonas afectarán prácticamente a todos los órganos. Los signos del embarazo que hemos mencionado anteriormente como el cansancio pueden acentuarse, lo que puede impulsar a hacer cambios en la rutina diaria.
El día que se produce la fecundación, la fusión de un espermatozoide con un óvulo, ya comienzan el proceso. Las células comienzan a dividirse para formar al pequeño en tu interior. Con los días, el útero de las mamás comienza a aumentar su tamaño y a acumular sangre. Además, empieza a formarse la placenta y el cordón umbilical.
En el primer mes es habitual no experimentar cambios perceptibles. Con el transcurso del tiempo, estos se harán más evidentes, ya que los órganos y sistemas del bebé comienzan a formarse y desarrollarse de manera progresiva entre el segundo y el tercer mes.
Por otro lado, el bebé inicia un período de crecimiento acelerado y de transformaciones significativas. Alrededor del día 25, su corazón comienza a latir y se desarrollan estructuras esenciales como el tubo neural, las extremidades y los pulmones. No obstante, el cráneo continúa en formación, ya que los huesos no se fusionarán por completo hasta que el cerebro alcance su tamaño definitivo.
A principios del tercer mes pueden empezar a diferenciarse los órganos sexuales, aunque quizá cueste distinguirse con claridad. Cuando el feto esté totalmente formado podrás conocer el sexo de tu pequeño. En esta etapa mide aproximadamente entre cinco y siete centímetros, mientras que su peso es de 25 gramos.
Segundo trimestre (semana 13-28)
Muchas mujeres consideran que la segunda etapa del embarazo es mucho más llevadera. Es posible que desaparezcan algunos síntomas como las náuseas o el cansancio extremo. Sin embargo, el útero seguirá en aumento, así como los pechos.
Como consecuencia del desplazamiento de los órganos internos provocado por el desarrollo del bebé, algunas mujeres pueden experimentar molestias digestivas o acidez estomacal, entre otros síntomas. Asimismo, es frecuente la aparición de estrías y diversos cambios en la piel.
Durante esta fase, el feto sigue desarrollándose y empezará a ser capaz de succionar y oír. Su cabeza ya podrá distinguirse bien, y también se podrá empezar a ver con más claridad el rostro. Probablemente, durante estos meses las mamás empiecen a notar los movimientos del bebé, pues su sistema nervioso comienza a madurar.
Alrededor del quinto mes el sentido del gusto se desarrolla. Por lo que puede que aumente tu apetito o tengas antojos, en estos momentos. Sus oídos también empiezan a escuchar tus latidos, tu voz y lo que sucede en tu interior.
Del mismo modo, el peso del bebé continuará incrementándose de forma constante, sobre todo en esta fase en la que empieza a acumular grasa corporal. Como resultado, es posible que la espalda de la madre se resienta debido a este aumento de peso y a los cambios posturales propios del embarazo.
Cuando vayas a realizar una ecografía podrás ver qué sexo es, sus manitas, sus pies y los movimientos que lleva a cabo. Al finalizar esta etapa el pequeño medirá, aproximadamente, 30 centímetros y tendrá un peso de entre 600 y 700 gramos.
Tercer trimestre (semana 29-40)
¡La recta final! Ya queda muy poco para poder ver la carita de tu bebé. A medida que pasa el tiempo, el feto evoluciona más. Escucha los sonidos procedentes de alrededor, se vuelve más sensible a la luz o los cambios del día y noche y, crece más rápido.
En esta última de las etapas del embarazo muchas mujeres sienten molestias a la hora de respirar, necesitan ir al baño con más frecuencia y comer en pequeñas porciones. Esto es consecuencia del crecimiento acelerado por el que pasa el bebé en esta última etapa del embarazo.
En estas últimas semanas el niño/a comienza a desarrollar sus pulmones, preparándose para el nacimiento. Es alrededor del séptimo mes cuando el bebé toma la posición cefálica, es decir, boca abajo. Sus movimiento serán más potentes. Hasta, en ocasiones, pueden ser visibles e incluso resultar dolorosos.
Diariamente suele tragar tres litros de líquido amniótico ayudando a que su cuerpo se acostumbre a funcionar. Tiene más energía y abre los ojos con frecuencia.
Durante esta etapa es normal los dolores en la zona púbica, las ingles o las lumbares son normales que también son causados del peso del bebé. Asimismo, la cadera y el cuello uterino comienzan a prepararse para el parto. Puede que a veces sientas contracciones uterinas, pero no significa que vayas a romper aguas. Esto es un proceso normal en el cuerpo de una mamá pocas semanas antes del parto.
Sin embargo, si las contracciones son seguidas y persistentes, puede que estés a punto de dar a luz. Recuerda que en este caso, debes conservar la calma. Aún tienes tiempo para ir al hospital. Cómo ya sabes, un parto dura aproximadamente entre 12 y 18 horas para la dilatación.
La recta final para el parto
En los últimos meses el médico controlará el progreso a través de exámenes vaginales a medida que se acerca la fecha prevista de parto.
Unos meses antes del nacimiento del bebé, debemos revisar todo lo necesario para su llegada: la bolsa para el hospital con su ropita, patucos, gorros, manoplas…. También es recomendable llevar arrullos o mantitas para que se adapte a la temperatura ambiente.
En esta última etapa del parto es normal sentir alegría y temor a la vez. Muchas mujeres pueden notar que están cansadas y tienen muchas ganas de que llegue el parto para ver la carita del bebé. Pero a la vez, temen enfrentarse a esta situación.
Pensar en el parto y preguntarse cómo será no es malo. Pero debemos confiar en los profesionales que nos rodean y no permitir que nos envuelva la angustia. Si es el caso, lo mejor es intentar descansar y estar relajadas ¡Anímate, que ya casi está!
En resumen, ahora que ya conoces cuáles son las etapas del embarazo te deseamos mucha suerte y ánimo en tu nueva vida. ¡Un abrazo grande!
