El bebé de 7 meses es capaz de hacer cosas que hace unas semanas nos parecían imposibles. Ahora su desarrollo avanza a pasos agigantados, tanto a nivel psicomotriz como social.

El bebé ya ha probado diferentes alimentos y lleva una dieta complementaria a la leche materna. Es capaz de estar sentado un largo periodo de tiempo y se comunica mediante balbuceos y palabras con sus padres.

Con 7 meses, el bebé, tumbado boca abajo, es capaz de girar sobre sí mismo. Cuando se encuentra tumbado boca arriba es capaz de erguir la cabeza. Sus movimientos son más seguros que hace un mes y tiene más confianza en sí mismo.

Es capaz de manipular los objetos y los juguetes cada vez con más habilidad. A esta edad, el bebé puede empezar a hacer movimientos previos al gateo, inclinándose hacia delante con las manos apoyadas.

Las emociones y los sentimientos del bebé de 7 meses son cada vez más evidentes. Podemos percibir cómo se encuentra por sus expresiones. También nos hará saber cuándo está enfadado o cuándo se siente más alegre. Los estímulos siguen siendo muy importantes en esta etapa.

Primeras palabras del bebé de 7 meses

El bebé de 7 meses está emocionado por aprender y descubrir todo lo que se presenta a su alrededor. Entre otras cosas, ansía poder comunicarse con vosotros.

Es importantísima la interacción con el bebé para que sus experiencias comunicativas sean provechosas y comience a emitir palabras.

A partir de los 7 meses pueden empezar a reconocer las palabras que asignan objetos que les rodean, sobre todo si insistís enseñándoselas siempre que quiere coger un objeto o tocarlo.

Después de los balbuceos comenzará a emitir sílabas sencillas como “da”, “pa” o “ma”. Si estamos muy atentos podremos percibir que quiere decir más palabras de las que a simple vista percibimos.

Los bebés aprenden a hablar a diferentes ritmos. En ocasiones un bebé puede no decir ni una palabra hasta los 9 meses o cerca del año, o puede empezar a emitir sonidos con significado a los 6 meses. Pero no debemos preocuparnos por estas variaciones, depende del desarrollo personal de cada bebé.

Para fomentar y ayudar con el aprendizaje del bebé es importante que le cantes canciones. De esta forma estarás estimulando su capacidad para apreciar y distinguir las melodías al mismo tiempo que va absorbiendo las palabras que dan nombre a las cosas o personas.

Primeros dientes en el bebé de 7 meses

La erupción de los dientes no tiene por qué alterar el ciclo diario del bebé, aunque puede producir varios síntomas. Podemos notar cómo el bebé babea mucho más que hasta entonces, o puede que lo encontremos un poco más irritable. También puede tener problemas para dormir, porque le cause molestias la encía. Cualquier otro síntoma, como la diarrea, la fiebre o la congestión nasal no tiene que ver con el nacimiento de los dientes y sería conveniente visitar al pediatra.

Cuando comienza a salirle los dientes, el bebé se llevará cosas a la boca con más persistencia. Para esto podemos ofrecerle un trozo de manzana o algún otro alimento semiduro en el que pueda morder sin preocupación para aliviar la molestia. También existen juguetes mordedores adecuados para este momento. Si enfriamos el mordedor estaremos aliviando también la inflamación.

El dolor por la dentición suele ocurrir sobre todo con el nacimiento del primer diente. La sensación al nacimiento del resto suele ser menos intensa.

Probablemente el bebé se encuentre irritado y rechace algún alimento. Puede que prefiera el biberón pero se dará cuenta que con la succión el dolor por el nacimiento de los dientes aumenta y lo dejará.

Los primeros dientes que le saldrán a tu bebé son los incisivos centrales inferiores. Lo habitual es que salgan al mismo tiempo. Como hemos comentado ya otras veces, puede que a tu bebé le hayan salido estos dos primeros dientes antes del séptimo mes. Entre el cuarto y el séptimo es lo más habitual.

Para aliviar las molestias causadas por la dentición puedes, además de ofrecerle un mordedor frío o un alimento, pasar el dedo, limpio, por la encía del bebé. Con firmeza pero con suavidad puedes pasarle la yema del dedo para aliviar temporalmente el dolor.

Las galletas para la dentición son adecuadas solo para bebés que ya hayan empezado a ingerir alimentos sólidos. Si tu bebé todavía no come demasiados alimentos complementarios no es conveniente que le des estas galletas. Pero el mordedor enfriado siempre es una buena solución.

El exceso de babas le ensuciará la cara al bebé, esto puede irritarle la piel y es conveniente que le limpies la cara con un pañito de textura suave para evitar erupciones.

Salvo que el pediatra te lo recomiende, no le des al bebé medicamentos o suplementos para la dentición. No suele ser necesario este tipo de complementos salvo que el médico diga lo contrario.