Con 9 meses tu bebé ya puede sentarse solo, mantiene la espalda recta y gira el tronco. Puede que ya sea capaz de permanecer cortos periodos de tiempo de pie sujetándose en alguna superficie.

Le encanta comer con las manos y sujeta el biberón con total habilidad. Tiene mucha destreza agarrando objetos y tirándolos, consigue apilar algunos bloques y lo que más le gusta es el ruido que hacen unos al golpear a otros.

Tu bebé ya dice monosílabos con claridad e incluso habrá dicho sus primeras palabras. Puede que sean “mamá” o “papá” o puede que se trate de otras palabras que haya escuchado muchas veces.

A esta edad ya conoce algunas rutinas, sabe cuándo vais a salir de paseo y se emociona al ver que os estáis preparando. Sabe pedir que le cojan en brazos y dice adiós con la manita.

Con respecto a la alimentación, mes a mes se producen algunos cambios, a continuación te hablamos de ellos. También te contamos qué ejercicios puedes hacer con tu bebé para seguir trabajando sus habilidades motrices y fortaleciendo sus músculos.

Alimentación de un bebé de 9 meses

El bebé lleva unos meses con alimentos complementarios a la dieta de leche materna. En el noveno mes ya habréis introducido varios alimentos, también habréis descubierto lo que le gusta más comer.

A esta edad es el momento perfecto para introducir en la comida del bebé algunas hortalizas crudas. Este puede ser el caso del apio, el hinojo y el tomate.

También puedes probar a introducir cítricos y uvas. Es importante quitarles la piel y las pepitas para que sean más digestivas para el bebé.

Lo ideal es dejar que el bebé toque la comida con sus manos. Es importante que experimente con las texturas además de con los sabores. De esta forma también identificará la hora de la comida como un juego y no como una tarea.

Puedes ofrecerle alimentos cortados en trocitos para que los coja con sus manos y los coma por sí mismo. Pueden ser trocitos de fruta, pastas o pavo, por poner algunos ejemplos.

A medida que vamos viendo que el bebé acepta cada vez más variedad de alimentos debemos ir reduciendo las tomas del biberón, de esta forma la transición será equilibrada.

Tu bebé es cada vez más activo así que piensa que cada vez necesitará una variedad más rica en nutrientes y comidas más contundentes.

Un posible ejemplo de menú diario para un bebé puede ser el siguiente:

Desayuno: una toma de leche materna, si todavía no ha dejado de tomarla.

Almuerzo: Puré de verduras con carne. En cuanto a la verdura puede tratarse de calabacín, patata calabaza… y en cuanto a la carne podría ser pollo o pavo por ejemplo.

También puedes variar la patata por pasta de fideos o arroz. También puedes añadirle unas gotas de aceite de oliva, pero es importante que no le pongas sal.

Merienda: Trozos de fruta. Aquí puedes darle los trocitos de fruta sin piel en la mano para que los coma por él mismo. Le será como un juego. Puedes variar entre manzana, uvas peladas y sin pepitas, mandarina…

También puedes variar entre fruta y un yogur para bebés.

Cena: una toma de leche materna o una papilla de cereales.

Ejercicios para tu bebé de 9 meses

A esta edad el bebé tiene mucha más fuerza que en los meses anteriores y continuará siendo así en los próximos. Puedes hacer ejercicios con él para ayudarle a fortalecer sus músculos y desarrollar su sistema motriz.

Estimular sus nuevas habilidades le motivará y conseguir cosas como las que te comentamos un poco más abajo ayudará con su autoestima.

Puedes jugar con él cerca de un mueble pequeño, como una mesa baja de salón, donde se pueda apoyar para levantarse. Puedes colocar juguetes u otros objetos que llamen su atención sobre la mesa para hacer que se levante a cogerlos.

Puedes jugar a la imitación con tu bebé. Esto es muy útil frente a un espejo. Puedes coger a tu bebé en brazos y poner gestos y muecas frente al espejo, también puedes hacer sonidos y animarle a que ponga las caras que tú pones.

De la misma manera que le das a probar los alimentos puedes hacer lo mismo con el olfato. Puedes oler tú la comida y luego dársela a él para que la huela. Esto también puedes hacerlo con otras cosas, como el gel de baño del bebé, la colonia o cualquier otra cosa que desprenda un olor agradable.

A esta edad ya está lo suficientemente espabilado para percatarse de si escondes un juguete. Puedes animarle a que te ayude a buscarlo y cuando lo encuentre, celebrarlo para que sienta que ha conseguido algo genial.

Puedes animar a tu bebé a gatear colocando juguetes que le gusten a una distancia de donde se encuentra. También puedes colocarte tú frente a él para que vaya gateando hasta ti.